El resurgimiento de los ritmos Afroamericanos...

El resurgimiento de los Ritmos Afroamericanos.
A partir de la llamada globalización, con todos sus puntos en contra y los beneficios que trae consigo hacía la mayor apertura de los mercados culturales y el mayor acceso a la información, los jóvenes comienzan a configurar sus símbolos y preferencias musicales en otros ritmos e intérpretes del mundo, me refiero a una aparente ruptura generacional en la cual se caen varios mitos que el rock y los medios de comunicación mantenían y se abre una brecha muy grande entre los medios de distribución cultural, llámese Internet, piratería, foros alternativos, y bandas emergentes que representan nuevas búsquedas artísticas. El flujo de información crece y el solo hecho de que existan páginas como myspace o facebook nos conecta de manera directa con una diversidad cultural que hasta hace unos quince años se mantenía casí desconocida para mucha gente.

Toda la música creada en Ámerica y el Caribe durante el siglo veinte y que fue parte de diversos movimientos tanto políticos y sociales, empieza a generar entre los jóvenes una curiosidad e identificación que el rock había hegemonizado, pues en estos momentos es posible encontrar manifestaciones culturales que surgen por todo el mundo y apropiarnos de ellas, ya sea como parte de un movimiento social o como una exploración al pasado por la emergencia de nuevos símbolos con los cuáles identificar una generación que requiere de ellos. Somos partícipes del exceso de información por medio del Internet, las modas, los movimientos que se politizan con la música, e incluso etiquetas como la de ‘Música del mundo’ y la creación de lugares específicos y temáticos. Como buenos clase medieros carentes de una identidad sólida y el vacío que se vive comúnmente en los espacios públicos como la escuela, la casa, las relaciones deterioradas con la familia y la necesidad de tomar algo para hacerlo propio e identificarse con ello, algunos jóvenes se han acercado a otros tipos de música ya no tan cercana al rock. Comenzó un interés en ritmos como el Ska, el reggae y de ahí se fué descubriendo el dub, la cumbia, la Salsa y demás ritmos afrolatinos que de repente sirvieron como un estandarte en la representación de nuestras pasiones sonoras, se empezaron a esquematizar más las preferencias, y con el crecimiento desmedido de un mundo cibernético del que es posible conocer y obtener información distinta para configurar una nueva forma de divertirnos, descubrir y apropiarnos de música nueva, comenzamos una aventura que a mi juicio en México sirvió como aire fresco para renovar un momento en que el rock nacional se fragmentaba hacía otros caminos. Es interesante observar que de repente adquirimos símbolos de la cultura llamada popular, como ejemplo está la cumbia, o la música del norte del país, para transformarla y apropiarla en lo que antes parecería de mal gusto, irnos a las ‘raíces’ y transformar la realidad tanto social como ideológica de una música de la cuál histórica y culturalmente no estuvimos relacionados, apropiarnos de símbolos que en apariencia se ven distantes cómo el Rastafarismo, religión Jamaiquina que reclama la esclavitud, el regreso a África poniendo a Jamaica como la Babylonia moderna y haciendo de la música reggae su principal bandera. Existe un desfase tanto cultural como histórico en esta posición y una música que surge a finales de los años 50 cuándo Jamaica apenas está consiguiendo ser independiente de Inglaterra, una música que viene de las clases Obreras y marginadas de la Isla y que hoy es uno de los ritmos más populares del mundo, que ha revolucionado la música Pop, que influyó a otro movimiento muy importante como el Hip Hop y que nos hace darnos cuenta que la historia de Ámerica es la historia de los intercambios culturales, que ritmos igual de importantes como el Calypso y el Soca Trinitario, la cumbia Colombiana con todo su poderío social a lo largo de América con un movimiento muy fuerte en México de los sonideros y su relación con todo el pueblo migrante en Estados Unidos, logrando identificar al pueblo Latinoamericano no solo en las clases populares si no también siendo adquirida por jóvenes entusiastas que desean darle otra proyección y otra sensibilidad, se podrían mencionar varios artistas a nivel mundial que están experimentando con músicas tradicionales incorporando diversos elementos desde la música latina en ritmos como el boogaloo, salsa, son, hasta reggae,calypso y hip hop, haré una lista de artistas de todo el mundo que representan esta respuesta tomando en cuenta que estos movimientos ya existentes incluyendo los ritmos más cercanos a la cultura africana ya han desarrollado públicos y culturas que apoyan y se identifican , bandas , productores e intérpretes que han encontrado en la música Afroamericana una forma de expresión tomando como referencia ritmos en ocasiones lejanos a su realidad cultural y que incluso han revivido a viejos intérpretes : Sidestepper Bomba Stereo, Caracas Central, Masserati, Orquesta 33, Bacalao Men, P18, Up Bustle and Out, Nortec, Ocote Soul Sounds, Antibalas, Sharon Jones And The Dapkings, Los Fulanos, Osaka Monaurial, Jump With Joe, Boogaloo Assasins, Little Tempo, The Drastics, Kaly Live Dub, Bioritmo, Bill Laswell, The Heliocentrics, Terrakota , King Changó, The aggrolites, Yesca…. Qué han revivido una nueva sensibilidad hacía estos movimiento, música festiva y fresca que renueva los panoramas sonoros.

Es así como podemos dar un pequeño panorama de esta diversidad rítmica que se ha transformado y fusionado en una nueva realidad, música que aún se mantiene en el subterráneo y que en ocasiones es adquirida por el mainstream con oportunismo y convertirla en burdo objeto de consumo y diversión olvidando que todos estos ritmos estuvieron acompañados de movimientos sociales trascendentes en las sociedades modernas tales como la Salsa y el Reggae que en ocasiones se convierte en cliché y moda pasajera . Aún con esto, los ritmos Afroamericanos, ya sea fusionados con la electrónica o en su forma original empiezan a ser parte de nuevos movimientos, foros y festivales atrayendo cada vez a más gente, reconociendo su importancia histórica y su valor cultural.
Izak Rivera